Disertando a la hora del postre// Fresas con nata
Capítulo 8 de la serie online de Melón Tajá en Mano: Disertando a la hora del postre
DISERTANDO
A LA HORA DEL POSTRE /
8.
FRESAS CON NATA
HAY
MUCHAS VARIACIONES DE FRESAS CON NATA:
Las
que pides en un menú sorpresa.
Las
que te traen en un bar de carretera,
en
un plato cualquiera
donde
la fruta hace tiempo
que
dejó de ser fresa.
Coges
el cuchillo
con
el que te has comido el cochinillo
y
le extirpas las esquinas a la fruta.
Durante
la operación
la
nata se desmonta.
Y
te quedas
con
media ración de fresas sin nada.
HAY
MUCHAS VARIACIONES DE FRESAS CON NATA:
Las
que preparaba tu madre
cuando
quería sorprenderte.
Las
que publica Google
en
su banco de imágenes.
Las
que imaginaste
en
tu época de estudiante.
Las
que te haces una mañana de domingo
cuando
te levantas temprano
y
abandonas a tu pareja entre sábanas.
Las
que te trae en sueños tu pareja a la cama.
HAY
MUCHAS VARIACIONES DE FRESAS CON NATA:
Las
que te comes en un momento de debilidad diurna:
yendo
a la nevera de puntillas y apretando el gatillo
de
la nata premontada,
mientras
coges un pequeña lágrima roja del bol
y
la lavas.
Como
si fueras un león marino
te
la colocas en el cielo de tu mirada
y
la alcanzas con los dientes.
Al
morderla,
la
fruta sangra.
Dejas
que la lágrima baje de tu boca
hasta
el cuello
y
relames hasta donde llega tu lengua.
El
resto de perfume,
seca
la piel mojada.
HAY
MUCHAS VARIACIONES DE FRESAS CON NATA:
La
nata de pastelero,
la
que hace mi padre,
densa
y espesa,
como
si fuera un árbol de navidad en miniatura.
El
árbol, sin tallo ni raíces, es la nata
y
las bolas, las fresas.
Éstas
las puedes devorar
en
compañía.
Tú
coges el capullo de la fruta,
la
rebañas en la nata montada
y
se la ofreces a tu comensal estrella.
Si
las luces están apagadas
y
nadie puede veros,
él
abrirá la boca,
te
mirará a los ojos
y
le acercarás la fruta
que
lo volverá loco.
Es
prudente
saber
el tiempo de espera.
La
siguiente boca será la tuya
y
así hasta que terminéis
en
el suelo de vuestro lecho,
entre
pechos y restos.
HAY
MUCHAS VARIACIONES DE FRESAS CON NATA:
Están
también las cortadas
a
modo de cocktail de frutas
con
zumo de naranja natural.
A
éstas les sobran la nata
y
el comensal.
No
hay fresas todo el año,
mayo
es el mes de este manjar rojizo con pepitas blancas
que
se funde en el paladar.
Puedes
tomarlas en salsa con carne
o
en la ensalada como vinagreta.
Las
fresas con yogur o kéfir
son
milagrosamente bellas.
El
gazpacho de fresas en verano,
o
la fondue de chocolate durante el nuevo año
son
buenos postres a la hora de disertar.
Se
aconseja beber fresas con cava o en daiquiris
para
potenciar su sabor.
Ingredientes:
100
gramos de fresas,
5
cucharadas de amor,
ron
blanco al gusto,
un
chorito de limón
y
una pizca de azúcar.
Modo
de elaboración:
Picar
hielo y batir el mejunje
como
si nos fuera la vida en ello,
humedecer
los bordes del copón
para
endulzar el ánimo y
servir
fresquito
para
explotar la pasión.
HAY
MUCHAS VARIACIONES DE FRESAS CON NATA:
Las
de copas y las de tarta.
Las
tartaletas y los pasteles
Los
sorbetes y los granizados.
Los
helados, los batidos y los aromas.
Las
magdalenas y las gelatinas.
Las
de su abuela, las de la mía.
Las
que se huelen. Las que se gustan.
Las
que se tocan. Las que se dejan.
Las
que se miman. Las que se riman.
Las
que se escuchan. Las que te ciegan.
Las
que se miran y las que se olvidan.
Como
estas: las golosinas.
HAY
MUCHAS VARIACIONES DE FRESAS CON NATA:
Poema: Joana Abrines
Cámara y Edición: Juanjo López
Grabado en el Parc de la Ciutadella en Barcelona. 2012
Con la colaboración de: Joan Garau, Mar Abrines, Pere Bonet, Catalina Campins, Jaume del Olmo, Giorgos Doukas, Anna Ellina, Clara Ferrer, Marga Ferrer, Ferri López, Juanfran Muñoz y Chara Tritaiou.
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