feliz 2008
Érase un vez una niña que nació el 1 de enero de 2008 en la mayor de las Baleares. Iris era tan pequeña que cabía en el cuenco de la mano de su madre. Como su nombre indica tenía los ojos muy grandes para no perderse ningún detalle de la vida. VIDA era una palabra demasiado grande para su tamaño pero con el tiempo aprendería a manejarla. Iris tenía una hermana con la que jugaba debajo de los árboles día y noche. El tiempo no le preocupaba lo más mínimo, fuera julio o febrero tenía todos los días del MUNDO para seguir jugando. Cuando era hora de irse a la cama obedecía porque sabía que al día siguiente las flores amanecerían junto a ella.
Le gustaba chuparse los dedos y mirar al cielo, aquella mañana de primavera escribió ALEGRÍA en el aire y cuando terminó su garabato se llevó el anular a la boca como un gran escritor que acaricia su pluma al terminar una buena novela. Cuando volvió a casa encontró a su padre con el traje de faenar, era pastelero y sin ser goloso tenía azúcar en la comisura de los labios. En las manos llevaba la ensaimada que un cliente le había encargado. La NIÑA imaginando el festín gritó: "yo quiero ser la primera en probarla". Con el primer sol, los gatos subían a los tejados a ver pasar los transeúntes y los demás gatos. Iris hacía lo mismo cuando volvía de la escuela. Se sentaba en la VENTANA a vislumbrar las casas vecinas, sus habitantes, sus colores, sus ventanas y en el mejor de los casos, sus sonrisas. La niña dejó de ser niña y mientras cumplía años continuaba siendo la protagonista de su pequeña historia. Antes de la llegada masiva de los turistas escogía un rincón en su playa favorita donde acariciaba el horizonte. Una tarde se hizo de noche más pronto que de costumbre y la línea azul se fundió a negro. Volvió a casa y continuó pensando en su primer AMOR.
Le gustaba chuparse los dedos y mirar al cielo, aquella mañana de primavera escribió ALEGRÍA en el aire y cuando terminó su garabato se llevó el anular a la boca como un gran escritor que acaricia su pluma al terminar una buena novela. Cuando volvió a casa encontró a su padre con el traje de faenar, era pastelero y sin ser goloso tenía azúcar en la comisura de los labios. En las manos llevaba la ensaimada que un cliente le había encargado. La NIÑA imaginando el festín gritó: "yo quiero ser la primera en probarla". Con el primer sol, los gatos subían a los tejados a ver pasar los transeúntes y los demás gatos. Iris hacía lo mismo cuando volvía de la escuela. Se sentaba en la VENTANA a vislumbrar las casas vecinas, sus habitantes, sus colores, sus ventanas y en el mejor de los casos, sus sonrisas. La niña dejó de ser niña y mientras cumplía años continuaba siendo la protagonista de su pequeña historia. Antes de la llegada masiva de los turistas escogía un rincón en su playa favorita donde acariciaba el horizonte. Una tarde se hizo de noche más pronto que de costumbre y la línea azul se fundió a negro. Volvió a casa y continuó pensando en su primer AMOR.
Julio, Julio, Julio, fueron las tres palabras que Iris repitió durante todo el VERANO, Si algún lugar especial existía en Mallorca era la Serra de Tramuntana, el más bello paisaje dibujado en el MEDITERRÁNEO. Allí descubrió La Foradada, una piedra de grandes dimensiones que saludaba desde el mar a los habitantes de la tierra. Le hizo una fotografía y la colgó en su cuarto, nunca más olvidó sus formas rectangulares. Una mañana se despertó más pronto que el amanecer y buscó un CAMINO sin piedras, lo encontró delante de su propia casa. Comenzó a andar hasta que llegó a una puerta de madera medio abierta, entró sin demasiado esfuerzo y encontró a Julio. Se besaron y sin darse cuenta pasó el tiempo, continuaba sin importarle. Compartieron nuevos secretos y un futuro que se convertía en pasado. Con su nuevo amigo paseó por los rincones más inéditos de una ISLA que todavía tenía mucho para regalarles. Aquel noviembre era frío, y una tarde delante de la chimenea su abuela le dibujó un molino. Un MOLINO en funcionamiento como los de antes. Iris supo que aquel detalle significaba mucho más de lo que podía leer en aquel instante.Como cada DICIEMBRE salió a volar, cien años después sabremos que lo conseguiría.
Comentarios
és un intent de donar-te les gràcies; de dir-te que llegeixo el que escrius; i fer-te arribar d'una manera tan avançada que duri molt la teva realitat sobre la viDa.
és un intent per primer vegada de deixar-te un comentari aquí:
Intent de paraules, que aquestes ajuden sempre a fer-te sentir més especial; Q perdurin sempre aquestes que per moltes coses bones que arriben a dir, mai fan mal.
Un beso tan i tan forT !!
d tota la familia i meu;
beL
Una abraçada enorme i fins els reis, querido paje, jajajajaja.
MUAK
por eso te queremos, .....
un besazo
llamj